Boiko Borisov ha ganado, pero lo tendrá difícil para volver a gobernar en Bulgaria. Los sondeos a pie de urna otorgan a su partido, el populista conservador Ciudadanos por el Desarrollo Europeo de Bulgaria, cerca del 26% de los votos en las elecciones legislativas celebradas este domingo. Son 7 puntos menos que hace cuatro años.
En segunda posición estaría el Partido Socialista Búlgaro con algo menos del 18% de las papeletas. La formación que lidera Kornelia Ninova no ha sabido capitalizar el descontento de la población por la gestión de la pandemia y los múltiples escándalos de corrupción que han salpicado a Borisov.
Sí lo ha hecho Existe Tal Pueblo (ITN), un partido de nueva creación que ha conseguido captar el 15% de los apoyos gracias a un mensaje populista contra la corrupción y las élites.
Los comicios han registrado una baja participación, del 47%, debido a la pandemia, que en estas semanas está registrando récords de contagios y hospitalizaciones. Otros cuatro partidos podrían entrar en el Parlamento y, según los analistas, será difícil conformar una mayoría estable.